Varios factores determinan si la captura de dióxido de carbono es una opción viable para una determinada fuente de emisión:
El CO2 podría capturarse de fuentes de emisión fijas de gran envergadura, como las centrales eléctricas o las plantas industriales. De encontrarse cerca de lugares de almacenamiento potenciales, por ejemplo de formaciones geológicas adaptadas, estas infraestructuras podrían ser elegidas para la temprana implementación de la captura y almacenamiento de CO2 (CAC).
A estas alturas, todavía no se consideran las fuentes de emisión pequeñas o móviles, ya sea en hogares, comercios o medios de transporte, porque todavía no son adecuadas para la captura y almacenamiento.
En el año 2000, cerca del 60% de las emisiones de CO2 derivadas del uso de los combustibles fósiles fueron producidas por fuentes de emisión fijas y de gran envergadura, como centrales eléctricas, plantas de extracción de petróleo y gas o industrias de tratamiento (Ver Tabla TS.2 [en] para más detalles).
Cuatro grandes núcleos de emisiones procedentes de tales fuentes fijas son: la región central y el Este de los E.E.U.U., la región noroeste de Europa, la costa este de China y el subcontinente indio (ver figura TS.2 [en]).
Las instalaciones de transformación de biomasa a gran escala, por ejemplo para la producción de bio-etanol, también generan emisiones con un alto contenido de CO2. Pese a que estas instalaciones son mucho más pequeñas y escasas, también podrían adecuarse a la captura y almacenamiento de CO2.
Muchas fuentes fijas de emisión se encuentran justo encima, o a una distancia razonable (menos de 300 km), de potenciales áreas de almacenamiento geológico
(ver figuras TS. 2a/2b
[en]) Más en inglés…
Si consideramos los diferentes escenarios de emisión, se prevé una captura potencial del 9-12% de las emisiones globales de CO2 para 2020, y del 21-45% para 2050.
Además, en unas cuantas décadas, los vectores energéticos como la electricidad o el hidrógeno, cuyo uso no emite carbono, podrían empezar a remplazar los combustibles fósiles utilizados en la actualidad por las pequeñas fuentes de emisión no centralizadas en hogares, negocios o transportes.
Estos vectores energéticos podrían producirse a partir de combustibles fósiles y/o de biomasa en grandes plantas centralizadas que generarían amplias fuentes de CO2 adaptadas a la captura de dióxido de carbono. Tales aplicaciones podrían reducir las emisiones diseminadas de CO2 provenientes del transporte y de los sistemas de suministro de energía no centralizados, aumentado el potencial de captura y almacenamiento de dióxido de carbono (CAC). Más en inglés…
This summary is free and ad-free, as is all of our content. You can help us remain free and independant as well as to develop new ways to communicate science by becoming a Patron!