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Contexto - El presente informe ofrece una visión de conjunto y un resumen de la situación europea en materia de drogas ilegales, así como una perspectiva de las tendencias, respuestas y políticas clave.
Este es un resumen fiel del informe publicado en 2015 por El Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (OEDT): "European Drug Report 2015 - Trends and Developments
Se estima que casi una cuarta parte de la población adulta de la Unión Europea ha probado drogas ilegales en algún momento de su vida, y que casi el 1 % de los adultos europeos son consumidores habituales (a diario o casi a diario) de cannabis.
Los opioides causan el mayor número de muertes (entre 10 000 y 20 000 al año), la mayoría por sobredosis. En términos generales, los consumidores de opioides tienen una probabilidad al menos 10 veces mayor de morir que las demás personas de su edad y sexo. Sin embargo, la visión de las consecuencias de salud pública relacionadas, no solo con las nuevas sustancias psicotrópicas, sino, de manera más general, con las pautas actuales de consumo de drogas, sigue siendo limitada. La mortalidad relacionada con la infección por el VIH es la causa indirecta mejor documentada de muerte entre los consumidores de drogas.
Los mercados europeos de las drogas siguen cambiando y se encuentran en rápida evolución: en 2014, se detectaron más de cien nuevas sustancias psicotrópicas.
Las respuestas sanitarias y sociales abarcan una amplia variedad de medidas adoptadas para las sustancias ilegales, desde las actividades educativas sobre las drogas hasta las intervenciones de protección del consumidor impulsadas por los propios usuarios en Internet.
En los mercados de droga europeos se encuentran dos productos de cannabis principales: la hierba de cannabis (marihuana) y la resina de cannabis (hachís). Por otra parte, en los últimos años, se ha producido la aparición de 130 cannabinoides sintéticos distintos fabricados en China, lo que ha añadido una nueva dimensión al mercado de esta droga. Estos productos químicos se suelen añadir a la materia vegetal y se envasan para su venta como productos “euforizantes legales”, lo que ha llevado a un aumento de los casos de problemas graves de salud asociados al consumo de estos productos de cannabis de alta potencia. El número de demandas de tratamiento por problemas relacionados con el cannabis ha aumentado, y las pruebas existentes apoyan las intervenciones psicosociales.
Existen amplias diferencias entre unos países y otros en cuanto a la sanción de las infracciones relacionadas con la oferta de cannabis, y el cannabis es la droga que más se incauta, representando el 80 % de las incautaciones , con creciente implicación de la delincuencia organizada. En Europa, las reflexiones sobre esta droga siguen centradas principalmente en los posibles gastos sanitarios asociados a ella.
La heroína es el opioide más común en el mercado europeo de las drogas, a pesar del estancamiento general en la demanda. Los problemas relacionados con la heroína siguen absorbiendo una parte importante de los costes sociales y sanitarios relacionados con las drogas en Europa, aunque se advierten recientes tendencias relativamente positivas. Resulta preocupante que se hayan notificado 14 opioides sintéticos nuevos desde 2005, y en algunos países en los que se ha observado un aumento de las estimaciones de pureza, ha crecido también el número de muertes por sobredosis.
En lo que respecta al tratamiento, la evaluación a largo plazo muestra una clara mejora general e ilustra el impacto que puede tener la prestación de los servicios apropiados.
La formulación de respuestas eficaces para reducir las muertes por sobredosis sigue siendo el principal reto en materia de políticas en Europa. Otros retos incluyen el consumo excesivo de benzodiazepinas en combinación con opioides, las tasas relativamente altas de infección de hepatitis C y la adaptación a una cohorte de edad avanzada.
Hay dos formas de cocaína disponibles en Europa, obtenidas casi exclusivamente en Bolivia, Colombia y Perú. La más común es el polvo de cocaína, y la menos frecuente es el crack, una forma en la que se inhala el humo. En los últimos datos se puede observar una disminución del consumo de cocaína. No obstante, en 2013 se notificaron en la Unión Europea más de 800 muertes asociadas al consumo de cocaína.
La preocupación pública y política por el consumo de nuevas sustancias psicotrópicas ha aumentado considerablemente en poco tiempo. Aunque el consumo de nuevas sustancias parece estar limitado en general, tanto la variedad como la cantidad de estas sustancias en el mercado de las drogas han seguido aumentando.
En 2014, se detectaron 101 nuevas sustancias psicotrópicas, sobre todo cannabinoides, estimulantes, alucinógenos y opioides sintéticos que imitan los efectos de las sustancias establecidas.
La pureza y consiguiente potencia (expresada como el nivel de la sustancia activa tetrahidrocannabinol o THC en el caso del cannabis) de las drogas de mayor consumo en Europa están aumentando, posiblemente debido a la innovación técnica y la competencia en el mercado. Concretamente los productos de MDMA de alta pureza, que resultan más atractivos para los consumidores, son preocupantes, y se ha advertido sobre sus riesgos para la salud. En 2014 se llevó a cabo una evaluación oficial sin precedentes de los riesgos se seis de estas nuevas drogas, demostrando la importancia de mantener la atención sobre las sustancias que causan determinados daños.
Internet está adquiriendo cada vez más eso en el mercado de las drogas. Por una parte, es posible ofrecer sustancias en línea y compartir experiencias a través de las redes sociales, pero por otra, los servicios de sanidad cada vez se sirven más de la web para el suministro de información y la prestación asesoramiento.
La mortalidad relacionada con la infección por el VIH es la causa indirecta mejor documentada de muerte entre los consumidores de drogas. La estimación más reciente indica que en 2010 murieron en Europa cerca de 1 700 personas por infección por el VIH/SIDA atribuible a la administración de drogas inyectables, pero la cifra disminuye cada año. En algunas grandes ciudades europeas preocupa la difusión de la administración por vía intravenosa de estimulantes entre pequeños grupos de hombres que mantienen relaciones sexuales con otros hombres. Las prácticas que implican la administración por vía intravenosa de metanfetamina, catinonas y otras sustancias en fiestas de sexo y drogas tienen consecuencias para la transmisión del VIH y los servicios de salud sexual. Este fenómeno pone de manifiesto la necesidad de respuestas concertadas en esta área.
La prevención del consumo de drogas entre jóvenes y los problemas relacionados es un objetivo clave de las políticas y uno de los pilares de la Estrategia europea sobre drogas 2013–2020. Ocho países han adoptado estrategias nacionales y planes de acción que abarcan las drogas legales e ilegales. Sin embargo, se presta cada vez más atención al desarrollo de actividades centradas en la educación y la prevención, así como la formación y sensibilización para profesionales. Asimismo, internet es cada vez más importante como plataforma para el suministro de información y la prestación de asesoramiento.
Las intervenciones específicas deben facilitar el acceso al tratamiento y garantizar la atención de las necesidades de diferentes grupos, concretamente los consumidores jóvenes de drogas, los consumidores derivados por el sistema de justicia penal y las mujeres embarazadas. Se estima que 700 000 consumidores de opioides recibieron tratamiento de sustitución en la Unión Europea en 2013.
Los programas específicos para consumidores de drogas de grupos vulnerables, como los sin hogar, los de edad avanzada y las personas LGBTQ están menos extendidos, a pesar de que muchos países notificaron la necesidad de este tipo de prestación.
2 Gamma-hidroxibutirato
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